domingo, 21 de julio de 2013

EL "CAFÉ SOSPESO"

También con un espresso se puede ser solidarios con los demás.

Lo podemos aprender de nuestro antepasados...

Desde hace más de 150 años que existe una tradición muy interesante, poética y solidaria, que hoy podría ser más actual que nunca. Nació en Italia, en los barrios obreros de la ciudad de Nápoles, pero rápidamente se extendió en todo el sur de Italia: el café sospeso (se puede traducir como el cafe pendiente).
 
Se trata de ir al bar y pagar dos espresso, uno para tomar al momento y el otro se queda "sospeso". Este otro café se queda pues pagado para otra persona (normalmente desconocida), que no puede permitirse de pagarse un café y que sobre todo lo aprovechaban los indigentes. Cuando un pobre entraba en el bar preguntaba si había algún café sospeso. El barista tenía las cuentas de los café sospeso que podía ofrecer. Al momento que ya estaban todos servidos, ya no había más hasta que otro cliente quisiera hacer este acto de caridad.
 
 Con el tiempo se ha difundido esta tradición solidaria también en otros países como Bulgaria, Rusia, Argentina, Estados Unidos y Costa Rica.

Actualmente también en España hay establecimientos que han adoptado esta buena costumbre. De hecho hay una página web (http://cafespendientes.es/) donde os indicará en que bares en España se puede ir a ofrecer unos #CafesPendientes.

Es un pequeño gesto para quien lo ofrece, que pero puede ser muy importante para quien lo recibe, además que varios de estos pequeños gestos puede hacer un lazo solidario muy importante.

En un acto de solidaridad completamente anónimo para quien lo recibe, pero que ayuda a los más necesitados.






 



 

No hay comentarios:

Publicar un comentario